Chistes para Mujeres
Una colección de los mejores chistes para mujeres para que se diviertan.
Chistes para Mujeres
- El matrimonio es como un baño público. Aquellos que esperan fuera están desesperados por entrar …
Mientras que los que están dentro están desesperados por salir. - Esposa: “¿Por qué estás en casa tan temprano?”
Marido: “Mi jefe dijo que me fuera al infierno” - Doctor: “¿Cómo está su dolor de cabeza?”
Paciente: “Ella está fuera de la ciudad.” - Compromiso no quiere decir que estás equivocado y que tu esposa tiene la razón. Sólo significa que la seguridad de tu cabeza es mucho más importante que tu ego.
- Se dice que cuando una mujer cierra los ojos, ve a la persona que más ama.
Pero cuando un hombre lo hace, la presentación de diapositivas comienza …. - El whisky es un invento genial.
Uno doble y te sientes soltero otra vez. - Las esposas son mágicas …
Pueden cambiarlo todo en una discusión. - Hay 3 tipos de hombres en este mundo: Algunos permanecen solteros y hacen que el mundo sea maravilloso, algunos tienen novias y hacen que el mundo sea maravilloso.
… El resto se casan y se preguntan qué pasó. - P- ¿Por qué las mujeres no pueden conducir bien?
R- Debido a que hay demasiados espejos en un coche que las distrae. - P- ¿Por qué las mujeres no pueden soportar un día en una selva?
R- No hay centros comerciales.
Más Chistes para Mujeres.
- Los policías hablando por radio:
-Mi capitán, aquí, reportándonos desde el lugar de los hechos
-¿Cuál es el reporte?
-Una mujer mató al marido de 35 puñaladas por pisar donde ella estaba trapeando.
-¿Y ya capturaron a esa señora?
-No mi capitán, todavía no se ha secado el piso. - En la orilla de la carretera, el policía ve venir un coche que avanza a velocidad de peatón. Se sube en su patrulla y va en pos del infractor. Cuando se acerca ve que hay cinco ancianas dentro, con los ojos bien abiertos y pálidas como fantasmas. La señora que va al volante, visiblemente confundida, le reprocha al agente:
- “Oficial, no lo entiendo. Yo iba conduciendo exactamente a la velocidad permitida”.
- “Caramba, señora, conducir a una velocidad mucho más baja que el límite también puede ser peligroso”.
- “¡Pero, oficial, yo iba exactamente a la velocidad permitida: 22 kilómetros por hora!”
- Tratando de contener la risa, el policía le explica que 22 no es el límite de velocidad sino el número de la carretera.
Un poco avergonzada, la dama sonríe y le agradece al policía haberla sacado de su error. - “Pero antes de dejarla ir, señora, dígame si todas están bien. Sus compañeras parecen estar muy asustadas y no han dicho palabra”.
- Restándole importancia al hecho, de inmediato, la señora responde:
- “No se preocupe, pronto estarán bien: ¡Es que acabamos de salir de la carretera 190!”
- Una joven rebelde muy liberada, entra en un bar completamente desnuda.
Se para frente al cantinero y le dice:
– ¡Sírvame una cerveza bien helada!-.
El cantinero se queda mirándola sin moverse.
– ¿Qué pasa? – dice ella- ¿¿Nunca ha visto a una mujer desnuda??-.
– ¡Muchas veces!-.
– ¡¡¡¿Y entonces que mira?!!!-.
– ¡Quiero ver de donde va a sacar el dinero para pagar la cerveza!